¿Cómo funcionan las estufas de leña?

• ¿Cómo funciona una estufa de leña?
• Tipos de estufas de leña
• ¿Cuántos metros cuadrados puede calentar una estufa de leña?
• ¿Cuánto cuesta instalar una estufa de leña?
• ¿Cómo calcular que estufa a leña necesito?
• ¿Qué es mejor estufa de leña o de pellets?

Fuente de la imagen: ©Fotolia.com

Las estufas de leñas tienen un funcionamiento sencillo, puesto que se basan en la combustión de leños y madera. Son similares a las tradicionales chimeneas que había en todas las viviendas de pueblos y en muchas de las ciudades, antiguamente. Sin embargo, las nuevas chimeneas de leña son cerradas, algo que aporta mayor seguridad.

Al estar cerrada nos aseguramos que no habrá humos dentro de la vivienda. Lo que hace que podamos disfrutar de un agradable confort y de la vista de los leños quemándose. Para que funcione correctamente y la madera pueda arder, es necesario que disponga de unas pequeñas entradas de aire. Este servirá para realizar la combustión y posteriormente saldrá por la chimenea en forma de humo.

Para poder encender el fuego dentro de la chimenea es necesario que tengamos una pequeña corriente de aire. Precisamente esas aberturas que dispone para que entre el aire en su parte inferior son regulables. Así, cuando queremos encender la chimenea de leña, las podemos abrir al máximo y así, favorecer el encendido. Las mantendremos en una abertura grande mientras la madera prende, pero una vez ya esté quemándose debemos reducirla casi al mínimo.

De esta forma aseguramos un pequeño flujo de aire, pero no excesivo. Ya que, si hay mucha corriente de aire, la combustión es mucho más rápida. Esto hace que necesitemos mucha leña y el efecto de su calefacción es igual que si se queman de forma más lenta.

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Aunque en un principio podemos considerar que todas las estufas de leña son iguales, no es así. Por ello, debemos tener claro que es lo que queremos o necesitamos, como queremos instalarla y otros factores para decidir cuál es la correcta para nosotros. Ese es el motivo por el que vamos a detallar las diferentes clasificaciones de las estufas de leña y sus características principales.

Según el material

• Estufas de leña de hierro fundido: tienen una inercia térmica mayor, debido a que tienen más material en sus paredes. Esto hace que mantengan más tiempo una alta temperatura, que van irradiando lentamente.

• Estufas de leña de acero: son más livianas. Se fabrican a base de planchas de acero soldadas, por lo que es más fácil conseguir diseños más elaborados. Sin embargo, tienen menor inercia térmica y se enfrían más rápido cuando dejamos de alimentarla con madera.

Según su instalación

• Estufa de leña independiente: son aquellas que se colocan en medio de la habitación o, como es más normal, junto a una pared. Es decir, son las estufas que podemos verlas por completo, tanto su parte frontal, donde tiene la puerta con vidrio, como sus laterales y la trasera.

• Estufa de leña insertada: son las que están pensadas para embutirse en la pared a modo de las antiguas chimeneas de leña. En este caso solo veremos su parte frontal, donde está se ubica la puerta para insertar la leña a quemar.

Según la distribución del calor

• Estufas de leña por convección: están construidas como dos cajas, una dentro de la otra. Así, en la interior se quema la madera y en el espacio que queda entre ellas circula aire limpio que se calienta para ser distribuido por la vivienda. Por ello dispone de una o dos salidas para conducir el aire calentado a otras habitaciones de la vivienda. No obstante, también emite calor por radiación por su parte frontal, aunque apenas sea perceptible cuando estamos frente a ella y a una distancia inferior a 2 o 3 metros.

• Estufas de leña por radiación: emiten calor a través de sus paredes. Por lo general, suelen ser estufas de hierro fundido y necesitan de alguna protección, para evitar que las personas, y especialmente los niños, toquen sus paredes.

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La capacidad de calentar de una estufa depende de diferentes factores y el principal es la potencia calorífica que es capaz de suministrar. Así, la calefacción de una chimenea de leña viene definida por la potencia calorífica, y esta se establece por el tamaño de la chimenea, por el material en que está fabricada, su diseño y por la forma en que distribuye el calor, es decir, por convección o por radiación.

También podemos potenciar la calefacción de nuestra estufa de leña variando el combustible. Ya que en función de los diferentes tipos de leña o biomasa que usemos nos aportará más calor.

No debe preocuparnos que cantidad de calor aporte una determinada estufa, puesto que siempre habrá algún modelo similar que mayor o menor potencia. Lo importante es que evaluemos la habitación o habitaciones que necesitamos calefactar. Sabiendo el tamaño de estas y su altura podremos determinar la potencia que necesitamos y elegir la calefacción de leña adecuada.

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Instalar una estufa de leña tiene un precio que puede variar entre los 200 y los 1.000 €, variando en función del tipo de estufa. Una estufa independiente no tiene muchas complicaciones, ya que solo debemos conectar la chimenea y llevarla al exterior. Si ya disponemos de una abertura o una antigua chimenea, el trabajo aún será más fácil y económico.

En cambio, los modelos empotrados y, sobre todo, aquellos que disponen de ventiladores interiores para calentar por convección, necesitan de un proceso de instalación más laborioso. Estas estufas, además de ir encastadas en una hornacina, necesitan una conexión eléctrica, para que los ventiladores puedan funcionar. Además, al disponer de salidas de aire caliente, estas deben canalizarse mediante tubos hasta las habitaciones contiguas o superiores, en las que queramos que llegue la calefacción de leña.

El precio de una chimenea de leña oscila entre los 450 y los 5.000 € o más. Ya que podemos elegir desde un modelo sencillo e individual, hasta los modelos con mayores prestaciones. Estos últimos pueden incorporar servicios adicionales, como el sistema de convección por ventiladores. También encontramos estufas con un horno incorporado o incluso cocinas.

Los factores que influyen en el precio de una chimenea de leña van desde los materiales empleados, su diseño, funciones y calidad. Así, las estufas sencillas de instalación independiente suelen tener precios bastante económicos, entre los 450 y los 1.500 €.

En cambio, los modelos que disponen de más prestaciones, como los ventiladores para calentar por circulación del aire, los que incluyen un horno o incluso las cocinas de leña, llegan a precios que sobrepasan los 5.000 €.

Los modelos de estufa con cocina de leña disponen de doble cristal en la puerta, para garantizar la seguridad de las personas. Puesto que es un electrodoméstico más y al que nos acercaremos constantemente para manipular la comida. También incluyen un control termostático del tiro, de modo que aseguremos una estabilidad en la combustión para poder cocinar en condiciones estables. Además, estas estufas de leña suelen llevar embellecedores y elementos de acero inoxidable.

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Para la elección de una estufa de leña debemos tener claras las necesidades de calefacción. El cálculo debe basarse en la potencia necesaria y que debe proporcionar la estufa a leña. Para ello tenemos que fijarnos en el tamaño de la habitación, su altura y el aislamiento de las paredes, ventanas y puerta.

Desde Hogarsense proponemos una guía para la compra de la adecuada entre los diferentes tipos de estufas de leña.

En función del tamaño de la estancia o vivienda que queremos calentar, los técnicos instaladores a los que consultemos nos facilitarán los diferentes modelos que encajan con nuestras necesidades. A mayor tamaño de vivienda, más potencia. También debemos tener en cuenta la altura, si la casa es de construcción antigua, suelen tener los techos más altos, por ello necesitará más potencia.

La calidad y cantidad del aislamiento influirá en las pérdidas de calor que sufriremos. Este factor influye de forma inversa a la potencia necesaria en la chimenea de leña.

La eficiencia de la estufa, o mejor dicho el aprovechamiento que esta hace de la madera que consume para darnos calor, es otro factor. Es por ello, que con el consejo de un profesional en estufas es fundamental para elegir aquella que nos aporte el máximo confort a un precio y consumo razonable.

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Si te preguntas que estufa elegir entre una de pellets y una de leña te podemos dar algunos datos que ayuden a tu decisión. El calor que se produce es diferente en función del combustible que usemos, bien madera de algún árbol determinado, cascaras de almendras u otros frutos secos, o los pellets. Aunque no hay mucha diferencia entre los poderes caloríficos de ellos.

Por ello, nuestro consejo es que te decantes en función de tu vivienda y la disponibilidad de suministro de cada tipo de combustible. Es decir, si vivimos en el campo, en un pueblo o una zona con leña cerca, y además disponemos de un espacio para almacenarla seca, está claro que debemos decantarnos por la chimenea de leña.

En cambio, si nuestra vivienda es pequeña, no tenemos mucho espacio para guardar los troncos de leña o simplemente no disponemos de suministro, lo lógico es pedir la instalación de una estufa de pellets. Hoy en día, podemos comprar pellets en cualquier almacén o centro de bricolaje. Nos los sirven en sacos que se pueden almacenar en espacios más reducidos, y además no van dejando suciedad de serrín, u otros.

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