¿Qué es el suelo hidráulico?

• ¿Qué es el suelo hidráulico?
• Precio de baldosas hidráulico
• Usos de pavimento hidráulico
• Instalación de suelo hidráulicas

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Un suelo hidráulico es un tipo de baldosa decorativa fabricada con cemento pigmentado. Este pavimento hidráulico se puede usar tanto en el interior y como en el exterior de la vivienda. Su origen se encuentra en España, a mediados del siglo XIX. Su uso como pavimento en las viviendas se prolongó hasta los años 60 del siglo pasado. Cuando los terrazos, los suelos cerámicos y otros sintéticos, como los suelos laminados aparecieron en el mercado o fueron más económicos.

El proceso de fabricación de las baldosas hidráulicas se caracteriza por el uso de moldes metálicos, en los que se ensamblan formas también metálicas para crear los dibujos. Estas formas metálicas delimitan los espacios para la aplicación de los colores. Sobre la base de colores se aplica una capa de arna fijadora, para asegurar que los colores no se mezclen, y sobre ella se incorpora la base de cemento. Una vez preparado todo, el molde es introducido en una prensa hidráulica, cuya acción compacta los materiales para darles consistencia de azulejo, y fija los colores del diseño.

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El origen del nombre no se conoce a ciencia cierta, si viene la etimología de la palabra o tiene otra procedencia. No obstante, algunos técnicos en la materia creen que puede deberse a las prensas hidráulicas que se utilizan para su fabricación o bien por la hidratación del cemento. El proceso de producción es muy manual, se puede decir que es artesanal, y por ello muy costoso.

La coincidencia de los inicios de esta técnica productiva de azulejos hidráulicos, con el desarrollo del movimiento arquitectónico modernista, propició que los diseños de las baldosas hidráulicas fueran cada vez más complejos y artísticos. De esta forma los fabricantes solicitaban la colaboración de importantes diseñadores y arquitectos de la época. Por ejemplo, Antoni Gaudí realizó solo un diseño de pavimento hidráulico, que pretendía usar para la Casa Batlló. Este suelo hidráulico finalmente se colocó en la Casa Milà, en vez de en la prevista. Hoy en día podemos admirarlo, pavimenta las aceras del Paseo de Gracia de Barcelona.

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En la actualidad, encontramos fabricantes que han conseguido baldosas hidráulicas de imitación. Con una fabricación automatizada de un suelo hidráulico imitado, con el que se consigue un acabado muy similar, aunque más económico. Su apariencia está tan bien conseguida, que quedan muy bien como suelo hidráulico para cocina y baño.

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Las auténticas baldosas hidráulicas se fabrican de forma artesanal o casi artesanal. Algunos fabricantes admiten peticiones de colores, para hacer series especiales. Pero por lo general se suele elegir entre los diseños y colores que ellos tienen en su catálogo. No obstante, su proceso de fabricación, en el que se necesita más tiempo para la producción, y las series son más pequeñas, los precios son sensiblemente mayores a otros tipos de pavimentos. Es por ello que no debes dejarte confundir por los precios de algunos supuestos suelos hidráulicos, ya que en realidad puede que se trate de suelos cerámicos que imitan a los hidráulicos.

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Los azulejos hidráulicos tienen mucha historia trás de sí y los podemos encontrar en multitud de edificios y construcciones emblemáticas de nuestro país, sobre todo aquellas que tratan de la época modernista. Un gran ejemplo de ello son todas las construcciones que Gaudi dejo en todo el país. Especialmente en Barcelona, dónde podemos admirarlo en la Casa Batlló y en la Casa Milà, el parque Güell, entre otros.

No obstante, en la actualidad podemos hacer uso un suelo hidráulico de muchas formas diferentes, no solo como pavimento general de nuestra casa. Es muy normal la utilización de azulejos hidráulicos en el frontal de la cocina, de forma que se le da una decoración diferente. También es muy habitual hoy en día la utilización de baldosas hidráulicas para conformar una alfombra central en el salón de nuestra vivienda.

Otro uso es como plato de ducha, con la correspondiente aplicación de un tratamiento impermeabilizante y otro antideslizante. Para evitar la monotonía en grandes paredes monocromáticas, es habitual que el propietario de la vivienda o el interiorista que diseña la decoración incorpore en el diseño algunos motivos con azulejos hidráulicos. También podemos ver pues solo hidráulico en espacios comerciales como pavimento en terrazas y otros espacios públicos.

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La instalación de baldosas hidráulicas es una tarea complicada, por lo que siempre recomendaremos que acudas a profesionales de los suelos hidráulicos. Ellos saben que una correcta colocación, con su sellado de juntas y impermeabilización, garantiza un pavimento hidráulico duradero y óptimo a lo largo de muchos años.

A continuación, hacemos un recorrido por los pasos que se necesitan para una correcta instalación, a modo de orientación y conocimiento, para los que estamos interesados en que una empresa con experiencia nos los instale en nuestra vivienda.

✓ Pavimentación de la base

El suelo hidráulico es muy sensible a las filtraciones y la humedad. Es por ello, que si nuestra vivienda esta directamente en contacto con el terreno, es una planta baja y no dispone de forjado sanitario, se debe realizar el aislamiento con material plástico o bien con aislantes convencionales usados para suelos de hormigón. De esta forma se evitarán posteriores filtraciones de agua o humedad.

Para asegurar la impermeabilidad del suelo, se prepara una base de hormigón con la adecuada mezcla de arenas, áridos y cemento, perfectamente nivelado. Lógicamente, debemos esperar a que se seque de forma adecuada antes de empezar con la colocación las baldosas hidráulicas.

✓ Colocación de la baldosa hidráulica

La colocación de un suelo hidráulico debe realizarse sobre una superficie nivelada, limpia y seca. Cuando el suelo esté húmedo o pueda generar humedad no es conveniente la instalación de los azulejos hidráulicos, ya qué pueden aparecer manchas de caliza sobre la superficie de la baldosa. Instalación de un pavimento hidráulico puede hacerse perfectamente con silicona de montaje, aunque lo más normal es utilizar con cemento cola flexible.

La cola de cemento debe ser preferiblemente de fraguado rápido y de color blanca. Debe extenderse tanto sobre el suelo como en la cara inferior de los azulejos hidráulicos. Una vez colocadas el instalador de suelos hidráulicos debe asegurarse de su correcta nivelación, ya que una vez fraguado el cemento cola no será posible corregir cualquier pequeña desviación o escalón.

Para evitar problemas con los cambios de temperatura, es conveniente ir dejando pequeñas juntas entre las baldosas hidráulicas que luego se rellenarán con la lechada.

✓ Tratamiento de impermeabilización

El tratamiento de impermeabilización y es algo que ha surgido en los últimos años. Este tratamiento asegura que un suelo hidráulico sea menos poroso. Gracias a ello será más difícil que la humedad los atraviese, apareciendo las mencionadas manchas calizas y provocando el deterioro de las baldosas hidráulicas. Con este tratamiento también se protege el suelo de las posibles manchas y se minimiza la absorción de agua, grasas o aceites, café u otros líquidos que se pueda derramar sobre el suelo.

Por lo general los fabricantes de azulejos hidráulicos aconsejan la aplicación de dos capas de impermeabilizante. La segunda debería realizarse tras la aplicación de la lechada. En este caso el instalador de pavimento hidráulico debe asegurarse que el suelo esté totalmente limpio de restos de lechada. Una vez el suelo limpio puede realizarse la segunda aplicación de impermeabilizante.

✓ Aplicación de lechada

La aplicación de la lechada no siempre se ha realizado. Su función es la de rellenar las juntas que han quedado entre las baldosas hidráulicas, como en cualquier otro suelo cuya instalación se realice con la obra, por ejemplo, en los suelos porcelánicos. El exceso de material de la lechada se retira con un paño húmedo esponja.

✓ Mantenimiento de un suelo hidráulico

Aunque parezca que el suelo hidráulico es delicado tiene gran resistencia, no olvidemos que se ha utilizado en muchas viviendas de España durante más de un siglo. Su limpieza diaria de hacerse con agua y jabón neutro. No debemos utilizar productos ácidos o con componente básica, que podría dañarlos.

En el caso de que pasados unos años, el suelo hidráulico necesite de un tratamiento especial para su limpieza y adecuación, es conveniente acudir a profesionales. Ellos disponen de los conocimientos adecuados y de las herramientas oportunas para realizar dichos trabajos de adecuación. Si los necesitas no dudes en consultarnos, desde Hogarsense te ayudaremos en todo.

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